"Este es cocina tradicional pero innovadora en su mejor momento. Hemos estado allí varias veces y no hay nada que no hayamos disfrutado; ¡además, sigues mirando platos que quieres volver a probar otra vez! Ubicación: Puente San Miguel no es bonito: el restaurante se encuentra en una gran casa de piedra tradicional en la carretera principal. Por lo general, sirven una porción de queso azul de cortesía mientras decides qué pedir. Imperdibles: Las tostadas de foie, albóndigas de calamar y otras pequeñas tapas. Primeros platos: Todos los platos de arroz, legumbres, las verduras... Segundo plato: Tanto el pescado como la carne son excelentes. He comido jargo, chuletillas de cordero, filete: todo excelente. Postres: Todos caseros y muy buenos. Vino: Precios muy razonables. Vino de la casa - Rioja, también Crianza y Reserva. La selección de vinos es limitada pero lo que hay es excelente. ¡El café es realmente bueno! Normalmente no me gusta cómo hacen el café en Cantabria. Si pruebas todos los platos, con vino crianza, saldrá entre 32-36 por persona, realmente excelente valor por la calidad de la comida y la cocina. El espacio es limitado y el restaurante tiene muchos clientes repetidos: verás a los cocineros charlando con mucha gente. Es muy informal, en el mejor estilo español de comer fuera de forma natural."
