"Como se mencionó, es un restaurante de cocina típica catalana. La comida es de buena calidad, muy típica y contundente. Ideal para un desayuno o almuerzo contundente. Sin embargo, encuentro que la cena es demasiado pesada. La decoración intenta recrear el estilo de una masía catalana, pero no lo logra del todo. La vista del paisaje desde la pequeña terraza o desde las ventanas del bar es fabulosa. Es un negocio familiar que necesita una revisión en su gestión. Algunos miembros de la familia son amables, mientras que otros no lo son en absoluto."