"un lugar que vale la pena descubrir, no sólo para el trato amable del personal, sino para la calidad de los platos. En nuestra visita probamos el ajo blanco, el revuelto de setas, las alcachofas con huevo, y cómo no, no podía faltar el surtido de croquetas caseras, sorprendentemente gratificando los camarones a la pipa por su intenso sabor. el resto no se quedaron atrás, como la croqueta de poder de pollo, que era la mejor croqueta de la ciudad en 20219, que por cierto, un premio más merecido y te recomiendo que lo intentes. nuestra noche está terminada con una porción de pastel de pistacho, también exquisita. un buen restaurante en granada, pequeño pero acogedor, donde se sentirá en casa y donde la comida le sorprenderá por su calidad y gusto. ¡Volveremos!"