"¡Lo recomiendo mucho! Hicimos un pequeño desvío del camino para llegar allí y tuvimos la suerte de conseguir una mesa. La comida fue absolutamente deliciosa, el lugar es frecuentado solo por locales (ni siquiera tenían un menú en inglés), así que es realmente auténtico. Probamos bacalao con pimientos, pulpo, bistec y una sidra sangría realmente única; todo estaba para chuparse los dedos."